Las fantasías sexuales sirven para aliviar la tensión sexual, erotizando nuestra vida en pareja
porque permiten desinhibirnos y actuar de manera espontánea añadiendo un toque
divertido y novedoso. Además al cometerse de pensamiento no se pueden
catalogar como infidelidades.
Tener fantasías puede hacer que nos entren ganas de
experimentar con nuestra pareja cosas nuevas, por lo que sin duda son buenas para nuestra vida sexual,
las realicemos o no.
Pero ¿por qué tenemos fantasías? Todo forma parte de un proceso vital que
nuestra memoria conserva, probablemento lo hemos visto, leído o escuchado a la
largo de nuestra vida.
También influye el tipo de educación, la manera en que se ha tratado la
sexualidad en la infancia, durante la adolescencia y en casa. Podemos incluso
haber vivido algo similar (en positivo o en negativo), lo que está claro es que
las fantasías no se puede seleccionar o programar... Son el fruto de
nuestra historia personal.
Las más comunes:
Hacer un trío. Los psicólogos dicen que imaginarnos haciendo
el amor a tres bandas puede indicar un vacío en nuestra vida sexual. Es como si
el autor de la fantasía tuviera la necesidad de 'novelar' su vida, de ponerle un
poco de pimienta porque se aburre.
También refleja una estricta educación sexual o un despertar tardío en la
sexualidad, y ya se sabe que las prohibiciones causan reacciones opuestas. En
estos casos el sexo se convierte en un tabú que sólo es alcanzable en nuestros
sueños y fantasías.
Mujer contra mujer. Sí, como la canción de Mecano, ¿te
acuerdas? Una manera delicada y sutil de hablar del lesbianismo, uno de los
grandes tabúes de nuestra sociedad. Sin duda, el fantasma de la homosexualidad
es quizás el que más miedo nos da.
Fantasear con al idea de hacer el amor con una mujer no revela una
homosexualidad reprimida. Es una etapa por la que la mayoría de la gente pasa
porque la naturaleza humana es intrépida y curiosa.
Nos preguntamos cómo sería estar con otra persona del mismo sexo, igual o más
experta que tú (y que cualquier hombre) en el conocimiento del cuerpo femenino.
¿Nos haría disfrutar más? Como la fantasía de los tríos, es
también una manera de saltarse las férreas barreras de la educación tradicional
y los convencionalismo sociales
Hacerlo con un desconocido. Muchas mujeres, a menudo
casadas, sueñan con compartir su vida con otro hombre. Suele ser un completo
desconocido, un amante idealizado, y es ese anonimato el que nos permite
transgredir todas las normas.
De hecho, la mujer puede sucumbir a todos sus deseos y anhelos sexuales sin
miedo a ser juzgada porque no le importa lo que piense el desconocido y porque
una vez terminado el encuentro los amantes se separarán para no volver a verse
nunca más.
Hacerlo en un lugar público y ¡que te pillen! Hacer el amor
en un callejón, un cine, un tren ... con el temor de ser descubierto desnudo
tiene un componente morboso al que imposible resistirse. Es una fantasía muy
común que puede ocultar cierta necesidad de exhibicionismo.
Las mujeres que tienen esta fantasía sexual podrían haber pasado por una
adolescencia difícil, ausente de relaciones amorosas o haber sido extremadamente
celosas y críticas a la hora de mostrar su cuerpo.
¿Qué tendrán los uniformes? Un bombero, un policía, un juez
... Todos estos hombres en el ejercicio de su profesión se visten de uniforme.
No se trata de un disfraz, ejercen una función y desempeñan su trabajo vestidos
de esta índole. Sin embargo, para muchas mujeres resultan irresistibles. ¿Por
qué?
Es algo similar a lo que ocurre con la erótica del poder, el uniforme imprime
caracter y solemos asociarlo con la autoridad. Las mujeres se sienten atraidas
por los hombres que entran dentro de esta 'categoría' porque simbolizan el
poder, la virilidad y la dominación, pero también el respeto porque tienen
vocación de servicio y aquí también entra en juego la admiración.
Confiesa, ¿cuál de éstas es tu fantasía?
Fuente: elleadore.com
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