Está bien, ya te has lanzado. Has decidido ser un hombre moderno, y probar las nuevas tecnologías también para ligar. Muy bien.
Te has hecho un perfil, has buscado,............ y por fin, has visto el perfil de una chica que te gusta, ya le has enviado un flechazo y has conseguido intercambiar un par de mensajes con ella.
Bien, ahora llega lo interesante, toca pedir una cita y lo más importante, toca que diga que sí.
Seguro que lo primero que se te viene a la mente es esperar “sentado” a ver si ella se decide, porque como estamos en el S. XXI y ahora son ellas quienes toman las riendas, has decidido ser caballero y evitar que pierda ese privilegio, ¿no?
Pues no amigo, lo que pasa es que no te atreves, o no sabes como hacerlo, pero qué no cunda el pánico, vamos a ayudarte a tomar la iniciativa y que la invites a salir
¿Quién debería pedir salir a quien?
Si te interesa conocerla en persona, tener un momento a solas cara a cara, está claro que deberías ser tú quién planifique esa primera cita. ¿Habéis quedado para chatear, aprovecha la oportunidad para sacar el tema, e intenta quedar para conoceros en persona y compartir un café. Hay un dicho popular que dice: el que quiera peces que se meta en el agua, así que ya sabes.
¿Cuándo es el momento oportuno para pedirlo?
No hay un momento oportuno concreto, más bien es algo que se percibe. ¡Ah! Qué lo que pasa es que no sabes distinguir ese momento, no pasa nada te vamos a explicar a modo rana Gustavo cuando es un buen momento y cuando no.Buen momento:
- Ella: ¿por dónde te gusta salir?
- Tú: habitualmente quedo por .....
- Ella: ¿Sí? Yo también, salgo bastante por esa zona
- Tú (ha llegado tu momento): ¿Te apetecería quedar el viernes y tomarnos una cañita en el Pepe Botella?Mal momento:
- Ella: He encontrado una frutería con los mejores precios de la zona.
- Tú: A mí me encantan las mandarinas ¿nos vemos el viernes?
¿Dónde y cuándo?
Has conseguido sacar el tema, pero ahora tienes que ofrecer un buen incentivo para que se decida a dar el siguiente paso, es decir, conoceros en persona. Como ya os conocéis sabes qué tipo de sitios podría frecuentar, así que recurre al misterio: “he conocido un local nuevo que creo que te encantaría, y además sirven esa cerveza que dices que te gusta…” (demuestra que es especial y sólo para ella y piensa que nuestro objetivo es que diga que sí, ahora recuerda lo que le has dicho y busca un local que cumpla con esas expectativas). También sabes a qué hora soléis hablar a través del chat, es decir, tienes la información sobre la hora: “como sales a las 20:00 y los jueves no tienes yoga, ¿te parece que pidamos la primera ahí?”.
Si dice que no…
En este caso, es mejor saberlo cuanto antes, así que no te desanimes, al menos ha sido clara y directa. Imagínate que hubiera dicho que sí y la cita fuera para pasar un buen rato con un “amigo”, eso sí hunde a cualquiera y crea falsas expectativas que marcaran futuros encuentros. Además, ¡más se perdió en Cuba y volvimos cantando!
Si dice que sí…
Ay, ay, ay… ¡qué nervios! Primero relájate y recuerda que ya os conocéis gracias al chat, habéis intercambiado mensajes… así que piensa qué es lo que te gusta de ella y qué cosas tenéis en común para utilizarlas a modo de rompe hielo en la primera cita, el momento más intenso y divertido que se puede producir en el universo, y ya hemos pensado en eso así que puedes leer cómo prepararse para una cita.
Ahora ya tienes todas las herramientas y todas las armas para conseguir una segunda cita, si es que te interesa.
Procura ser honesto, y nunca olvides, que ellas son MAS listas y tambien mas astutas que nosotros.
Te deso suerte amigo.
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No vayas por donde el camino te lleve,
ve por donde no hay camino, y deja huella.