10 Recompensas emocionales
Nuestro cerebro está preparado para recibir con sensaciones de recompensa cosas necesarias para nuestra supervivencia e, inevitablemente el ser humano busca conductas que activen estos sistemas. Continuamente necesitamos de ellos para elevar nuestra autoestima, sentirnos mejor y romper con determinados estados de ánimo que no nos aportan nada. Algunos de estos "regalitos" tienen la virtud de efectos curativos.
La vida está necesitada de estos pequeños empujones emocionales, pequeños placeres que son recomendables en términos de equilibrio y armonía. Estos estímulos actúan en el cerebro proporcionando placer, reforzando nuestro sistema inmunitario, alivian el dolor, combaten el estrés y como no, mejoran el estado de animo.
Cada persona tiene diferentes tipos de recompensa emotiva. ¿Alguna de estas que relato a continuación es la tuya?
CARICIAS. (Antídoto contra el dolor)
Cuando una persona recibe una caricia, el cerebro la recibe activando sus áreas de recompensa.
Existen unas fibras nerviosas (llamadas C-Táctil) que son las encargadas de transmitir dicho placer al cerebro, aún cuando éste recibe impulsos de dolor en la misma zona.
¿Quién no se auto acariciado en la zona que se ha dado un golpe?
CHOCOLATE. (Para sentir lo que un enamorado)
Comer chocolate hace que aumente la feniletilamina, sustancia capaz de mejorar el ánimo, la misma sustancia que recibe el cerebro de las personas enamoradas. Además, también, contiene flavanol, sustancia que favorece la circulación y estimula la actividad cerebral.
Así que no te lo pienses dos veces: date un capricho (de vez en cuando) de una dosis de chocolate y verás cómo tu cerebro (y tu estado de ánimo) te lo agradecen.
LA SIESTA. (Gran reconfortante para el corazón y la mente)
Se ha demostrado que 10-15 minúntos de siesta mejoran la concentración y el rendimiento laboral, ayuda a recuperar energía y vitalidad y, además, previene problemas cardiovasculares.
En niños también se ha demostrado sus beneficios terapéuticos, así los que duermen siesta tienen menos tendencia a la hiperactividad, a la depresión y a la ansiedad.
MEDITAR. (Pensamiento positivo)
Se ha demostrado que la meditación reduce la actividad en áreas cerebrales relacionadas con las emociones negativas.
El primer error que cometemos muchas veces en la búsqueda de la felicidad es confundirla con sensaciones placenteras que dependen de circunstancias externas.
Así, los monjes budistas, después de muchas horas de meditación alcanzan la paz interior y se convierten en personas más positivas.
CAMBIAR DE LOOK. (Mejora la autoestima)
Optar por un cambio de color, corte de pelo o simplemente darse unos mimos en un centro de estética, es un gesto de amor propio que aporta seguridad y dispara la autoestima. De esto saben muchos lo peluqueros, verdaderos artífices en recuperar el ánimo de sus clientas.
La aceptación de uno mismo y su imagen es uno de los componentes del desarrollo de un individuo, su bienestar personal y autoestima.
INTERNET. (La red estimula el razonamiento)
Navegar por la red hace que el cerebro se vuelva más experimentado en el razonamiento complejo y en la toma de decisiones.
El trato con las personas a través de las redes sociales como el Facebook favorece nuestras satisfacciones.
BUENA COMPAÑÍA. (La amistad mejora el sistema inmunitario)
La presencia de un amigo activa áreas del cerebro que permiten liberar hormonas relacionadas con el bienestar y otras sustancias que bloquean el paso a la desconfianza y a la ira.
La amistad refuerza el sistema inmunitario y es el mejor antídoto contra algunas patologías coronarias, la presión arterial alta y el colesterol.
Rodéate de buenas amistades
MOMENTOS DE SOFÁ. (La holgazanería, en justa medida, tiene premio)
El cerebro recupera energía y repara sólo en sensaciones placenteras, muchas veces desconocidas. Cuando el organismo recibe este aporte de relajación, la mente muestra mayor vigor y disposición para la creatividad.
Que se aburran, por Dios, que se aburran! Con este lema los psicólogos quieren reivindicar esos momentos en los que los pequeños deciden qué hacer o no hacer nada. Con agendas tan programadas, de principio a fin, los niños pierden autonomía y capacidad creativa.
Deja que se aburran y de paso, abúrrete tú también.
SEXO. (Protege la piel, los vasos... y la próstata)
Es el placer en estado puro.
Para la mujer es un tratamiento natural anti-edad, produce estrógenos (hormona que ayuda a mantener la piel y el cabello suave) la previene de cardiopatías y mejora la circulación, a la vez que suaviza los vasos sanguíneos.
En el hombre reduce el riesgo de cáncer de próstata, favorece la secreción de testosterona, oxitocina, endorfinas... todas ellas hormonas del deseo y el bienestar.
IR DE COMPRAS. (Garantía de equilibrio mental)
En estos tiempos que corren, a muchas personas les invade la tristeza, depresión y otros trastornos, solo por el hecho de no poder gastar. Es usual oír “ir de compras nos hace sentir mejor” ¿Frivolidad? Para la psicología es uno de los reguladores de emociones.
Pues ya lo sabes, en momentos bajos cómprate algo.
Conociéndonos más, dándonos algún que otro capricho y en definitiva queriéndonos más nos ayuda a mantenernos mejor tanto física como mentalmente.
¿Qué recompensa emocional te regalas tú?